19.8 C
San José
lunes, 25 noviembre, 2024
Inicio Sucesos Autopsia evidencia pesadilla que vivió anestesióloga Cedeño: fue víctima de violación

Autopsia evidencia pesadilla que vivió anestesióloga Cedeño: fue víctima de violación

0
Foto tomada de explant Costa Rica.
  • Además, la autopsia confirmó que murió de un fuerte golpe en la nuca
  • Hay tres sospechosos detenidos por el crimen

Redacción- La autopsia realizada a la anestesióloga María Luisa Cedeño reveló la pesadilla que vivió antes de su muerte.

Cedeño, antes de ser vilmente asesinada, fue víctima de violación, lo que le generó graves lesiones en sus partes íntimas, evidencia el informe patológico.

También, la autopsia reveló que la anestesióloga murió a causa de un fuerte golpe en la nuca.

Esa información fue extraída de un dictamen médico legal, realizado por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), informó este martes La Nación.

Además, la autopsia demostró que la doctora presentaba golpes en las mejillas, brazos y tórax, así como signos de asfixia.

De hecho, el informe indica que la víctima presenta ”múltiples hematomas” en distintos músculos del cuello, lo que revela que el o los responsables de su muerte, intentaron asfixiarla.

Como había trascendido días atrás, el informe también confirma que Cedeño tenía una mordedura en la mejilla derecha, otra en el brazo derecho y una última en el pecho.

En el informe patológico, también se informa que la doctora fue asesinada entre las 4:48 a. m. y la 12:48 p. m.

Según informó La Nación, el informe señala que Cedeño tenía “datos de síndrome asfíctico como congestión ocular, cianosis distal, congestión pulmonar, congestión renal, congestión cerebral y sangre oscura fluida al corte”.

El crimen de la anestesióloga ocurrió el pasado 20 de julio, en el Hotel La Mansión Inn, en Quepos, Puntarenas.

Cedeño fue hallada sin vida en una habitación del hotel, donde estaba envuelta en una sábana y con varias heridas.

Por este caso, las autoridades han detenido a tres hombres, incluido el dueño del hotel donde se hospedaba la doctora.

Se trata de dos hombres de apellidos Herrera y Miranda Izquierdo. Además de Harry Bodaan, quien es el propietario del hotel.