- El presidente Alvarado aún no se ha pronunciado con respecto a la ley
Redacción – El Consejo Universitario de la Universidad Estatal a Distancia (UNED) se une a las otras instituciones y grupos sociales para pedirle el veto a la pesca de arrastre al presidente de la República, Carlos Alvarado.
«El pronunciamiento fue tomado en la Sesión 2830-2020, (…) en momentos en que Costa Rica espera conocer cuál será la decisión que tomará el mandatario frente a esta ley que ha dividido a la opinión pública», indica la institución.
Para el 27 de octubre, académicos del Centro de Educación Ambiental y de la Escuela de Ciencias Exactas y Naturales de la UNED enviaron una carta al presidente para pedirle el veto a la ley.
Ellos señalan los múltiples tratados y convenios internacionales, suscritos por Costa Rica, que la comprometen a la adopción de diversas medidas en defensa del ambiente y la vida silvestre.
La pesca de arrastre había sido declarada ilegal por parte de la Sala Constitucional de Costa Rica en 2013, debido al daño ambiental que produce, prohibiendo la emisión o renovación de nuevas licencias.
«La técnica conocida como pesca de arrastre no puede entenderse como sostenible, ni social ni ambientalmente, puesto que afecta directamente la calidad de vida de miles de pequeños pescadores en el litoral pacífico de nuestro país y daña permanentemente el fondo marino», dice la UNED.
Por su parte, el presidente Alvarado aún no se ha pronunciado con respecto al veto, pese a que afirmó estar en contra de la pesca de arrastre durante su campaña electoral.
LEA TAMBIÉN: «Salí a vetar»: Ticos usan frase del presidente para pedir veto a la pesca de arrastre
La UNED recuerda que, en setiembre de 2016, Costa Rica se convirtió en el primer país del mundo en firmar un Pacto Nacional por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), «hecho por el cual, adquirió una gran responsabilidad internacional con esta agenda».
«Dentro de los ODS, el número 14 Vida Submarina señala que: ‘El océano impulsa los sistemas mundiales que hacen de la Tierra un lugar habitable para el ser humano. Nuestra lluvia, el agua potable, el tiempo, el clima, los litorales, gran parte de nuestra comida e incluso el oxígeno del aire que respiramos los proporciona y regula el mar’. Revivir la pesca de arrastre es una acción contraria a este objetivo mundial», dice la UNED.
En el pronunciamiento citan que los ODS platean, como prioridad, la obligación de proteger los océanos porque «la biodiversidad marina es vital para la salud de las personas y de nuestro planeta. Las áreas marinas protegidas se deben gestionar de manera efectiva, al igual que sus recursos, y se deben poner en marcha reglamentos que reduzcan la sobrepesca, la contaminación marina y la acidificación de los océanos».
El Consejo Universitario deliberó en relación con el Plan Nacional de Desarrollo e Inversión Pública (PNDIP), el cual plantea el desarrollo sostenible como uno de los elementos orientadores de dicho plan, entendido como aquel que «satisface las necesidades de la generación presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades»,
Por lo que, aprobar la pesca de arrastre, se desvía de la orientación que tiene el plan de desarrollo de la Administración Alvarado.
Finalmente, resaltan el artículo 50 de la Constitución Política: «Toda persona tiene derecho a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado».