Redacción- Ya sean emprendimientos que surgieron a raíz de la pandemia o en negocios ya establecidos, la falta de liquidez de las pequeñas y medianas empresas es una de las tantas consecuencias negativas que ha dejado el paso de la COVID-19; situación que perjudica el desarrollo de su actividad, el pago de las obligaciones patrono-laborales, proveedores, servicios básicos y demás responsabilidades.
Independientemente de la actividad comercial, el factoreo o descuento de facturas se convierte en una herramienta idónea y segura para enfrentar este tipo de barreras que impiden el progreso y crecimiento de dichas empresas.
LEA TAMBIEN: (Video) Cantante Bryan Ganoza busca su segunda novia: «Soy polígamo»
El factoreo es un mecanismo de financiamiento a corto plazo, mediante el cual, una persona física o jurídica, promueve su crecimiento a partir de la venta de sus cuentas por cobrar vigentes a una institución financiera, dedicada al descuento de facturas, utilizando la “factura comercial” como fuente de pago.
Es decir, “el emprendedor entrega sus facturas por cobrar a la entidad financiera para recuperar su dinero. Una vez que la empresa descontadora compra la factura a la PYME, le brinda el dinero de forma anticipada menos un porcentaje y posteriormente la entidad se dedicará a dar seguimiento a las deudas y cobrarlas” explica José Ricardo Salazar, Presidente de la Junta Directiva de la Cámara Costarricense de Empresas de Factoreo (CCEF).
El concepto de factoreo es tan amplio que en la actualidad pueden descontarse valores como facturas, letras de cambio, pagarés, contratos, órdenes de compra y cualquier otro documento que respalde una cuenta por cobrar de un cliente.
Para Salazar, el factoreo, además de ser un procedimiento rápido y seguro que ayuda a las pequeñas y medianas empresas a recuperar la fluidez económica necesaria para seguir realizando sus actividades y generando más capital, es una forma de minimizar la necesidad de recurrir a complejos procesos administrativos en busca de un crédito bancario para mantenerse en el mercado.
En Costa Rica existen más de 30 entidades que ofrecen legalmente este producto financiero.
Actualmente, el factoreo se encuentra regulado bajo la ley número 9691 Ley Marco Legal del Contrato de Factoreo y cuenta con fundamentos en el Código de Comercio a través de los artículos 460 bis y del 490 al 494. El Código Civil en sus artículos del 1101 al 1116 también abarca el factoreo así como la Ley de Garantías Inmobiliarias del artículo 19 al 25.