Redacción-Austria tomó medidas extremas ante el aumentó desproporcionado en los contagios de sus pobladores. Los reportes por Covid-19 llegan a niveles récord y no fue marzo de 2020, cuando se declaró la pandemia, sino noviembre de 2021 en Austria.
Por eso, el gobierno austriaco decidió implementar la cuarentena, que afectará a millones de ciudadanos.
El confinamiento es para quienes no hayan recibido el esquema completo de vacunación contra el coronavirus.
«Debemos aumentar la tasa de vacunación. Es vergonzosamente baja», dijo el canciller Alexander Schallenberg.
Los no vacunados sólo pueden salir de sus casas por un número limitado de razones, como ir al trabajo o a comprar productos básicos.
Las medidas ampliarán las introducidas hace una semana, que prohíben el acceso de los no vacunados a lugares como restaurantes, hoteles y teatros.
«En realidad, hemos dicho a un tercio de la población: no saldrás más de tu apartamento salvo por determinadas razones. Se trata de una reducción masiva de los contactos entre los vacunados y los no vacunados», dijo Schallenberg.
Aproximadamente el 65% de la población austríaca está totalmente vacunada contra el Covid-19, lo cual representa una de las tasas más bajas de Europa occidental.
Austria tiene una de las tasas de infección más altas del continente europeo, con una incidencia de siete días de 815 por cada 100.000 habitantes.