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  • Ambientalistas culpan a presidente de Brasil
  • El Amazonas es el bosque tropical más grande del mundo

Redacción – La selva del río Amazonas, también conocida como Amazonia, arde en llamas como símbolo de gritos de auxilio para salvar la naturaleza de la intervención humana. Según el Instituto Nacional de Investigación Espacial (Inpe), se han reportado 72 mil 843 incendios en Brasil, más del 80% en comparación con el mismo período del año anterior.

La agencia espacia, además, informó que las imágenes satelitales detectaron 9 mil 507 nuevos incendios forestales desde el jueves anterior, la mayoría en la cuenca del Amazonas, lugar del bosque tropical más grande de todo el mundo con aproximadamente la mitad del tamaño de Estados Unidos, hogar de múltiples especies de flora y fauna y, también, vital para contrarrestar el calentamiento global.

Para el pasado mes de junio, se perdieron 769,1 kilómetros cuadrados de selva del Amazonas, sin nombrar la cantidad de animales que han muerto o han perdido su hogar.

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Al Amazonas también se le llama «los pulmones del planeta», pues su pureza produce el 20% del oxígeno en la atmósfera terrestre, o sea, 20% del aire que se respira.  Profesionales en la materia afirman que es vital sumar esfuerzos para frenar el calentamiento global.


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Cabe destacar que los incendios forestales son comunes en la época seca, pero expertos afirman que, esta vez, también son ocasionados por las malas prácticas de  agricultores que queman ilegalmente tierras para la cría de ganado.

Son los grupos ambientalistas los que culpan y reprochan al Gobierno de Brasil, liderado por Jair Bolsonaro, pues aseguran que se ha dado un aumento de deforestación durante su mandato y que «ha relajado los controles en el país».

De acuerdo con CNN, hace unas semanas atrás, el jefe del Inpe fue despedido tras discutir  con el presidente Bolsonaro sobre los datos de deforestación que reflejan los estudios.

Otro dato que sorprende al mundo entero es que los incendios hicieron que São Paulo se oscureciera antes de lo esperado este martes anterior: la cantidad de humo opacó la luz del día.