Redacción – Masaya y Managua son dos ciudades llenas de color, cultura y baile pero ahora, eso se ha transformado producto de las actitudes del gobierno contra el pueblo. Los comercios locales de Nicaragua ya no saben cuáles medidas tomar para protegerse de los disturbios que está generando el liderazgo de su presidente Daniel Ortega.
Estos bloqueos en diferentes partes de las carreteras del país vecino han dejado varados a 6 mil camiones de carga con pérdidas de más de $70 millones.
Masaya es una de las ciudades más acorraladas por los grupos armados por el régimen de Ortega. En esta zona, las calles están bloqueadas con más de 100 barricadas y los vecinos se han organizado para garantizarse su propia seguridad.
Incluso, hasta la Virgen María también se ha atrincherado, pues los lugareños buscan sentirse protegidos y respaldados por su fe.
Los mismos vecinos del sitio se han encargado de recolectar alimentos para los jóvenes que permanecen en las «trincheras» para cuidarlas, por medio de las parroquias que cumplen el papel de centros de acopio y refugios para atender heridos.
Según datos del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), Nicaragua tiene 54 días con esta crisis que ha cobrado la vida de más de 130 personas.
Todo este conflicto actual es producto de la reforma que impuso Ortega en la Seguridad Social, por lo que la población reaccionó en contra y el mandatario destapó una violenta represión contra quienes se manifestaban contra las reformas.