Redacción – La asesora de confianza de Epsy Campbell presentó a renuncia en el despacho de su -aparentemente- madrina y canciller de la República, luego de una serie de críticas y cuestionamientos que ha recibido esta cartera en la comparecencia ante diputados.
En su carta de renuncia, Catherine Rivera McKinley destaca que ella no es ahijada de bautizo de la vicepresidenta y que no tienen algún lazo por consanguinidad.
Ante esto, la canciller, al asignarle este puesto a Rivera Mckinley, quien a su vez es madrina de su nieta, Ante el cuestionamiento, señaló también “no tiene ningún grado de consanguinidad que quede en actas esto”, pero admitió que sí es su ahijada.
“No hay ningún grado de consanguinidad y es necesario que eso quede absolutamente claro. Los grados de consanguinidad son los que definen la imposibilidad o no de nombrar a una persona”, expresó Campbell
La carta explica que, la ahora exasesora se va «con la frente en alto», pues mantienen la versión de que nunca hubo una irregularidad.
«Con profundo convencimiento en el trabajo que se está llevando a cabo desde la Cancillería, con la frente en alto, y el sentimiento del deber cumplido, me permito presentarle mi renuncia irrevocable al cargo de asesora a partir del día lunes 29 de octubre de 2018», dice un punto en la carta presentada a Campbell.
En la comparecencia, Campbell acudió a su defensa y, como era de esperarse, negó rotundamente la presencia de irregularidades en los nombramientos.
“Solo tres nombramientos se han hecho y se lo acabo de demostrar”, le dijo la Canciller a la diputada por el Partido Liberación Nacional, Yorleny León, cuando esta le cuestionó si la información brindada por diferentes medios de comunicación sobre los nombramientos era falsa.
“Es mentira, aquí están los documentos. Le paso los documentos, no hay ninguna piñata. Tres de diez direcciones. Y si eso no son pruebas suficientes, pues eso es lo que efectivamente hay”, dijo.