Redacción- Un encuentro que reunió a unas 130 mujeres aspirantes a cargos públicos en el próximo proceso electoral busca una generación de igualdad que garantiza los derechos humanos de las mujeres libres de violencia y femicidio.

La actividad se realizó este 02 de diciembre en el Encuentro Liderazgos transformadores libres de violencia en la política y en las redes, que fue organizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Instituto Nacional de las Mujeres (INAMU) y la Red Costarricense de Mujeres Municipalistas (RECOMM).

El Encuentro contó con la participación de la Ministra de la Condición de la Mujer y Presidenta Ejecutiva del INAMU, Patricia Mora Castellanos, la Representante Adjunta del Programa de las  Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) Kryssia Brade Jiménez y la Presidenta  de  la Red Costarricense de Mujeres Municipalistas  (RECOMM),  Karen Porras Arguedas.  Fernanda Murias y Sergia Galván, reconocidas Expertas Internacionales, lideraron talleres de reflexión con las candidatas sobre la violencia contras las mujeres en medios de comunicación y redes sociales, así como la importancia de fortalecer liderazgos transformadores en sus agendas locales para el desarrollo de las comunidades cantonales.

“Las mujeres participamos en política para contribuir con el mejoramiento de la calidad de vida de toda la población. En las comunidades locales nos hacen falta esos espacios de participación para la toma de decisiones. Nuestra aspiración es la paridad en número y en derechos sin discriminación, no menos.

Necesitamos transformar la política con nuestra participación, hacerla más empática, más humana, más inclusiva”, dijo Patricia Mora Castellanos, Ministra de la Condición de la Mujer y Presidenta Ejecutiva del INAMU.

Kryssia Brade Jimenez, Representante Adjunta del PNUD, destacó la necesidad de asegurar la participación plena y efectiva, y la igualdad de oportunidades para las mujeres con el fin de garantizar el desarrollo sostenible.

“En el PNUD reconocemos que cuando las mujeres desempeñan un papel pleno y en las mismas condiciones que lunidades son más inclusivas y resilientes. Según nuestras estimaciones, el logro de la igualdad de género en el rendimiento escolar y en la participación en la fuerza laboral para 2030 puede lograr un aumento de 4,4 billones de dólares, es decir, un 3,6%, del producto interno bruto mundial.

Por eso dirigimos hoy los esfuerzos para promover la participación paritaria de las mujeres en las elecciones municipales, fortalecer sus liderazgos para la transformación de las realidades cantonales, la creación de alianzas estratégicas que aseguren unir acciones para el desarrollo local, y también para luchar contra la violencia que viven en el mundo de la política”, aseguró Brade.os hombres en la vida social, económica y política, las economías son más fuertes .

Estudio sobre la caracterización de la violencia en el ámbito municipal en Costa Rica

Una reciente investigación del PNUD llamada “La violencia contra las mujeres en la política: un estudio sobre su caracterización en el ámbito municipal actual”, revela cómo se manifiesta la violencia contras las mujeres que deciden lanzarse a la política en nuestras municipalidades, cuáles son sus impactos económicos y comunales, y los efectos destructivos para las mujeres políticas.

“Es una forma de desalentar, amenazar y castigar a las mujeres que se atreven a participar, hablar, denunciar, ejercer plenamente sus derechos políticos. Se manifiesta a través de comentarios denigrantes y cargados de estereotipos, donde se invalida o minimiza el aporte que una mujer política puede hacer al desarrollo de su cantón, le bloquean sus funciones municipales hasta ser víctima de hostigamiento sexual y amenazas de muerte”, explica Brade Jiménez.

Los resultados de las últimas elecciones municipales en Costa Rica no han sido alentadores para las mujeres. En el 2010 resultaron electas como alcaldesas 10 mujeres en las 81 municipalidades y esta cifra solo aumentó a 12 mujeres alcaldesas en el 2016, pasando de un 12,3% a un 14,8%.

En los demás puestos de elección también resaltan las desigualdades: en el año 2016 las intendencias fueron ocupadas por un 37,5% de mujeres y un 62,5% de hombres; un 40,4% de mujeres en las regidurías propietarias versus un 59,6% de hombres y un 36,3% de mujeres en las sindicaturas propietarias versus 63,8% de hombres.