Redacción – Moody’s anunciará, la tarde de este lunes, que tomó la decisión de bajar la calificación de Costa Rica.
Esto se debe a la debilitación de las finanzas públicas y le costaría al país unos $250 millones al año.
Así lo adelantó el ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, quien informó que la calificadora de riesgo pasó la nota de BAI negativo a BA2 estable.
«Si llegamos a ser grado de inversión, Costa Rica economizaría ¢300 mil millones al año», destacó el ministro.
Además, explicó que el promedio ponderado de la deuda en el país es de 7,9%.
La calificación Ba2 hace más difícil que los inversionistas compren bonos nacionales.
Esta calificación significa que Costa Rica está sujeta a especulaciones y alto riesgo crediticio, así como «de tener la calidad de crédito en general, pobre».
«Si nos subieran la calificación en un grado donde estamos B1 con perspectiva negativa, a la calificación que sigue, el gasto de intereses bajaría por ¢100 mil millones al año. Si nos bajan la calificación, sube ¢150 mil millones», dijo.
Chaves se presentó esta mañana a la Asamblea Legislativa a una comparecencia ante los diputados de la República.
«Queremos ganar grados de inversión, teníamos una situación difícil ya y se complicó más», destacó Chaves ante los diputados.