- El presupuesto incluye además ₡33 mil millones en pago a la CCSS
- Este recorte se suma al realizado en el primer extraordinario por más de ₡70 mil millones
Redacción-Al asumir este lunes el cargo como ministro de Hacienda, Elian Villegas envió a la Asamblea Legislativa un proyecto de ley de presupuesto extraordinario que contempla una reducción del gasto por ₡62 452 millones.
Lo anterior porque está convencido de que el gobierno “debe socarse la faja” ante la crisis que vive el país por la pandemia provocada por el Covid-19.
Este extraordinario se suma al recorte por más de ₡70 mil millones que el Gobierno ya había planteado en el primer presupuesto extraordinario.
La disminución corresponde principalmente a recortes en partidas del presupuesto de Gobierno Central, a la reducción del pago de intereses -lo que es posible gracias a la sustitución por deuda barata aprobada por el Congreso- y a colocaciones de títulos realizadas a finales del 2019 en términos más favorables.
El presupuesto extraordinario incluye, además, los ₡75 mil millones donados por el INS que permitirán al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y al Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) dar al menos 200.000 bonos proteger a personas afectadas laboralmente por la pandemia provocada por Covid-19.
También incorpora el pago de ₡33 mil millones (unos $58 millones) del empréstito por $380 millones del Banco Interamericano para el Desarrollo con la Agencia Francesa para el Desarrollo, aprobado por la Asamblea Legislativa, para ser destinado a la CCSS, a fin de solventar la disminución de ingresos por caída de contribuyentes a la seguridad social, provocada por la pandemia.
En paralelo con este extraordinario, el Ministro de Hacienda reiteró el compromiso manifestado la semana pasada de entrar a revisar con lupa el presupuesto para encontrar más oportunidades de contención del gasto.
El jerarca recordó que la pandemia ha causado la mayor caída en el crecimiento económico desde inicios de los años 80 y que debido a los gastos extraordinarios y caída de los ingresos el déficit primario podría alcanzar el 3,4% del PIB y el déficit financiero un 8,6% del PIB, estimándose que la deuda pública alcanzaría un 67% del PIB, al finalizar el 2020.