Redacción. Los congresistas aprobaron un recorte a la deuda política de campañas electorales, reduciendo de un 0,19% a 0,085% del Producto Interno Bruto (PIB) del 2020, para un monto de ¢36 mil millones.
Este proyecto fue dispensado de todo trámite por el Plenario Legislativo el 1° de octubre, siendo la única consulta de carácter obligatorio al TSE, conforme al artículo 97 de la Constitución Política.
El criterio del máximo órgano electoral fue emitido el pasado 13 de octubre mediante oficio TSE-19712020, en el que los magistrados acordaron por unanimidad no objetar el proyecto y con ello, dar vía libre para que el Congreso pudiera continuar su discusión y votación por el fondo.
Según las estimaciones realizadas, de no haberse aprobado el proyecto, el Estado habría tenido que erogar un monto superior a los ¢66.000 millones; mientras que, con la aprobación del mismo se reduce el gasto electoral a una cifra cercana a los ¢19.000 millones (nacional) y ¢10.000 millones (municipal).
“Esto es un gran avance que viene a contribuir con el ahorro del Estado. Considero que en estos momentos difíciles de finanzas que atraviesa el país, los partidos debemos actuar dando el ejemplo”, indicó el diputado liberacionista, Gustavo Viales Villegas.
Finalmente, el proyecto prevé facilitar los procesos internos a los partidos políticos para la realización de sus procesos de renovación de estructuras y ratificación de candidaturas.