Foto: Cortesía.
  • La tica tuvo que echar manos de sus ahorros para realizar el viaje
  • Rivera también es abogada y practicó fisicoculturismo en el pasado

Redacción – Historias como las de Catalina Rivera son dignas de compartir, ya que esta tica irá a su quinto Mundial de Karate sin entrenador por falta de dinero, pero aún así irá a darlo todo para representar dignamente a Costa Rica.

Rivera es de Cartago y desde pequeña ha sido súper deportista, pero fue hasta los 26 años, que optó por iniciar a practicar Karate Kyokushin, que tiene por objetivo la eficacia de combate real o de contacto. El ganador es el que imparta más daño en dos minutos.

Desde el día uno no ha dejado de entrenar y la única vez que paró fue en 2017, debido que se quebró un dedo y tuvo que guardar reposo por un mes. Tras ese tiempo ha hecho múltiples esfuerzos que hoy la tienen como cinta negra segundo dan.

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El apoyo de sus padres ha sido fundamental para esta karateca radicada en Granadilla de Curridabat, que relata que su madre nunca la ha visto pelear, debido que le da pánico ver a su hija como recibe golpes. Mientras, que su papá si ha ido a verla.

Todo eso esfuerzo habla bien de la costarricense, que tendrá la oportunidad de representar al país en su quinta justa universal desde el 2013. Su categoría de -55 kilos en su disciplina de Karate Kyokushin, donde enfrentará a otras 10 atletas.

La tica alista sus maletas para emprender su viaje al Mundial que se realizará en Polonia los días 19 y 20 de noviembre. Su salida del país se dará el lunes 15 del presente mes para llegar con tiempo a suelo polaco.

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En el camino para llegar a este magno evento global tuvo que luchar contra el Covid-19, al cuál la afectó de gran forma debido que las secuelas fueron importantes, pero aún así no perdió la fe y empezó a trabajar con todo para llegar a su peso ideal.

Pero todo esto lo ha tenido que hacer sola, ya que la falta de recursos económicos o otro tipo de ayuda, tendrá que pagar su propio viaje y gastos e ir sin su entrenador.


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Es tan grande su deseo de representar a Costa Rica, que Catalina tuvo que pagar de su bolsillo su propia indumentaria, boletos aéreos y hospedaje. Eso sí, no oculta que es feo no tener en su esquina a un entrenador que la aconseje y lleve el tiempo.

Incluso, revela que su único apoyo será una amiga de Londres, Inglaterra, con quién compartirá habitación en el hotel y ahí disminuir los costos de la estancia en Polonia.

«He sentido mucho apoyo de los ticos en los últimos días, hasta me ha hecho llorar y eso es súper importante, porque uno está sola en esto, he entrenado sola y he sido mi entrenadora con todo, la experiencia y madurez me ha ayudado a prepararme, los compañeros de dojo también me han ayudado, pero estoy motivada y con la ilusión de darlo todo por Costa Rica», afirmó Rivera a AMPrensa.com.   

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La atleta aprendió karate con su ex-esposo, con quién todavía entrena, se lleva bien y mantiene contacto, con el fin de continuar más vigente que nunca en esta arte marcial.

La nacional espera conseguir pronto un patrocinador y así poder ir a más campeonatos de su disciplina, con el fin de codearse con las mejores del orbe. Si usted desea ayudar a Catalina Rivera puede hacerlo vía Sinpe Móvil al 88-54-43-93.