- La actriz dio su opinión sobre las redes sociales pues considera que son «siniestras»
Redacción- ¿Beber sangre de su pareja? Es algo que suena sumamente extraño, sin embargo, aunque no parezca, es algo muy normal que hacen muchas personas al rededor del mundo, y ese es el caso de Megan Fox y Machine Gun Kelly.
En una entrevista con Glamour UK, la actriz reveló un nuevo dato sobre su relación, pues confesó que ella y el rapero beben su sangre mutuamente y que son solo unas gotas, y todo es con fines de rituales.
«Supongo que beber la sangre del otro podría confundir a la gente o que la gente nos está imaginando con un cáliz y que somos como en ‘Game of Thrones’, bebiendo la sangre del otro..Son solo unas gotas, pero sí, consumimos la sangre del otro en ocasiones solo con fines rituales», explicó Fox.
También explicó que es algo que tienen controlado, aunque a veces Colson Baker (el nombre real de MGK) es más descuidado con el tema.
«Y es algo controlado como, ‘Vamos a derramar unas gotas de sangre y cada uno la bebe..Él es mucho más descuidado y frenético y caótico, donde está dispuesto a cortarse el pecho con cristales rotos en plan de, ‘Toma mi alma'», comentó la actriz.
Asimismo, reveló que mantiene a sus hijos alejados de las redes sociales, pues la cataloga como «siniestras», y que incluso ella misma tiene personas que le manejan sus cuentas.
El pasado 11 de enero mediante sus redes sociales, Megan Fox y el cantante dieron a conocer la noticia de que se comprometieron.
En una entrevista con Vogue, el artista dio todos los detalles sobre el anillo que le dio a la bella pelinegra, mencionó que él junto con el diseñador de joyas Stephen Webster, crearon todo el diseño de las dos piedras.
“Sé que la tradición es un anillo, pero lo diseñé con Stephen Webster para que fueran dos. La esmeralda, su piedra de nacimiento, y el diamante, mi piedra de nacimiento, engastados en dos bandas magnéticas de espinas que se unen como dos mitades de una misma alma formando el oscuro corazón que es nuestro amor”, expresó Machine.
