Imagen captura de pantalla

Redacción-El exsacerdote Mauricio Víquez Lizano deberá cumplir los 20 años de prisión al cual fue sentenciado en marzo del 2022, por abuso sexual y violación agravada en perjuicio de un niño de 11 años en el 2003.

La Sala de Casación Penal rechazó el recurso de apelación interpuesto por la defensa técnica y se confirma la pena de 20 años de prisión en contra del exsacerdote.

En ese sentido, tras darse razón al Ministerio Público sobre los hechos probados, se mantiene la pena de 20 años de prisión, la cual fue dictada por el Tribunal Penal de Desamparados, en marzo del 2022.

Hechos acusados
La Fiscalía demostró que Víquez se aprovechó de su posición de poder, autoridad, relación de confianza con la víctima y de su condición de sacerdote, para cometer las agresiones sexuales.
Los abusos contra la víctima, que en ese momento era un menor de edad, sucedieron en el 2003 en la Parroquia San Juan Bautista en Patarrá de Desamparados, tiempo en el que Víquez ejercía como párroco.

Al exsacerdote se le estaba acusando de 29 delitos de abusos deshonestos; 22 de abuso sexual en perjuicio de persona menor de edad; uno de tentativa de violación; 3 de violación; cinco de difusión de pornografía y uno de corrupción agravada”.

Sin embargo, la única causa que prosperó porque las causas estaban prescritas, fue la de un hombre de apellidos Alvarado Quirós, quien fue víctima de Víquez a sus 11 años de edad, cuando trabajaba en distintas labores que le encargaban en el templo.