Inicio Nacionales Playa Ventanas se convierte en la 5ta costa accesible del país para...

Playa Ventanas se convierte en la 5ta costa accesible del país para personas con discapacidad, movilidad reducida y adultos mayores

En 3 años, se han recolectado más de 10 toneladas de tapitas plásticas

0
  • Para construir esta pasarela y la silla anfibia se necesitaron 1000 kilos de tapas plásticas

Redacción – En el marco del Día Mundial del Ambiente, Playa Ventanas de Osa en el Pacífico Sur se transformó en una playa accesible para personas con discapacidad, movilidad reducida y adultos mayores.

Las Buenas Acciones Verdes de Monge, en colaboración con la Red Costarricense de Turismo Accesible y la Asociación de Desarrollo de Ojochal, instalaron 33 metros de pasarelas retráctiles y entregaron una silla anfibia en este paraíso tropical.

La ADI de Ojochal asumirá la administración de la playa accesible, operando por ahora los miércoles, jueves y viernes de 8am a 2pm. La asociación cuenta con el apoyo de la Municipalidad de Osa y del ICT.

Desde 2021, se han recolectado más de 10 toneladas de tapas plásticas, con las cuales se construyeron e instalaron más de 250 metros de pasarelas y cinco sillas anfibias para cinco playas en total: una en Playa Espadilla en Manuel Antonio, dos en Puntarenas, una en Manzanillo en Limón y ésta última en Playa Ventanas.

“Las Buenas Acciones Verdes de Monge tienen dos propósitos, por un lado, reducir la contaminación y ayudar, por el otro, generar impacto social, por eso qué mejor momento que el Día Mundial del Ambiente para inaugurar esta playa accesible. Este proyecto también genera reactivación económica por medio del turismo accesible, pero lo más importante es ver el impacto en adultos mayores o personas con discapacidad que ingresan al mar por primera vez o después de más de 5, 10 o hasta 20 años sin hacerlo, por eso los invitamos a seguir donando tapitas plásticas en cualquiera de las 200 tiendas Monge en todo Costa Rica”, señaló Carlos Fernández, director del programa Las Buenas Acciones de Monge.

En la inauguración también participó el Centro de Vida Independiente Morpho, de personas con discapacidad de la Zona Sur, que probaron los implementos, así como doña Gisselle Sáenz, vecina de Pérez Zeledón que tenía 4 años de no ingresar al mar, porque con su silla de ruedas no se podía entrar.

“Esto es acceso real para personas con discapacidad a destinos turísticos, saber que Gisselle hoy pudo entrar al mar nos llena de satisfacción. Monge con sus buenas acciones está cambiando la sociedad, haciéndola más inclusiva tomando en cuenta poblaciones vulnerables, ojalá otras empresas se inspiren y repliquen lo que Monge está haciendo”, dijo Wendy Barrantes, presidenta de Morpho.

Es por eso que la campaña de recolección de tapas plásticas se mantiene en las más de 200 tiendas Monge a nivel nacional, con colectores para su depósito, que posteriormente Monge traslada a su centro de distribución, se consolidan y luego se fabrican las pasarelas y sillas anfibias.

Las pasarelas son de carácter modular y permiten cubrir cualquier superficie, tienen alta resistencia y larga vida útil. Cada paño pesa 74 kilos y es de 1.5 x 3 metros, para un total de 11 que conforman los 33 metros ubicados en playa Ventanas en el Pacífico Sur.

«Representa un paso significativo hacia nuestro objetivo de equipar todas las playas públicas del país con implementos de accesibilidad. La campaña DONATAPA, sin fecha de caducidad, integra la recolección y sensibilización ambiental con la economía circular, generando un impacto social positivo. Esta es la playa número 14 beneficiada por la campaña y la segunda en la zona de Osa. Hoy salimos de Playa Ventanas con el corazón lleno, sabiendo que más personas podrán disfrutar de la playa sin barreras, y esperamos que más entidades se unan a este cambio de conciencia hacia un diseño universal y accesibilidad para todas las personas.», explicó Stephanie Sheehy, directora ejecutiva de la Red Costarricense de Turismo Accesible.

La silla anfibia soporta una capacidad hasta 90 kg. Además, viene con tornillos de acero inoxidable, lonas especiales para aguas salinas, no absorbe humedad, pesa 26 kilos y también es de plástico reciclado. Es un diseño nacional creado por la Red Costarricense de Turismo Accesible.

Para construir esta pasarela y la silla anfibia se necesitaron 1000 kilos de tapas plásticas y el proceso tuvo un costo de $6,300 USD.

Salir de la versión móvil