• Los expertos advierten que el cambio de células puede causar cáncer en la piel 

Redacción- Durante esta cuarentena, es común que las personas permanezcan más tiempo frente a la computadora, el televisor o el celular, una práctica que podría ser muy perjudicial para la piel.

La creencia popular, señala que las manchas en la piel se generan solamente por la exposición a los rayos de sol, durante días calurosos o vacaciones. Sin embargo, expertos de la Universidad de Ciencias Médicas, UCIMED, advierten que esto no es así y piden a la población, prestarle mayor atención a este tema.

De acuerdo con la doctora Natalia Bastos, decana de Farmacia de UCIMED, el exponerse una gran parte del día a aparatos tecnológicos, puede generar afectaciones en la piel, como envejecimiento prematuro, arrugas o manchas.

“Se ha comprobado, que la luz gama que emiten las computadoras u otros dispositivos, produce una radiación térmica que altera las células de la piel, como los melanocitos, los cuales, son los productores de las manchas conocidas como melasma”, explica Bastos.

El contexto actual, nos exige estar más inmersos en las nuevas tecnologías, las cuales, se han vuelto una herramienta indispensable para nuestras labores cotidianas, en medio del confinamiento que vivimos por la crisis del COVID-19. Sin embargo, es necesario tomar medidas para prevenir afectaciones en nuestra piel, señala la experta.


LEA TAMBIÉN: ¡Cuídese! Personas con obesidad corren mayor riesgo ante el virus


Bastos aclara que, “pese a que luz gama no es tan agresiva como los rayos ultravioleta, la constante exposición a ella contribuye a pigmentar la piel, de igual forma que lo hace la luz solar”.

“Esta situación, se agrava en las personas que tienen una exposición mayor a las seis horas diarias y que no utilizan una protección adecuada. Irónicamente, los lugares con mayor exposición son las oficinas, no solamente por el uso de computadoras, sino también, por la luz artificial (luz blanca), afectando a hombres y mujeres desde jóvenes”, añade la doctora.

Para prevenir estas afectaciones, lo ideal es usar un protector solar indicado para cada tipo de piel y, sobre todo, que sea recomendado por un profesional.

“Las recomendaciones dependen del fenotipo de la piel, cada caso debe ser estudiado de manera individual. Por ejemplo, el protector solar puede ser de factor 20 o 30 y se debe aplicar cada seis horas, pero las personas con piel seca, deben usar los de presentación en crema, mientras que aquellas personas que padecen acné, deben emplear protectores solares en gel”, explica Bastos.