Redacción- ¿Cómo será mi vida de pareja?, ¿qué haré con mi trabajo? o ¿cómo sostendré a mi familia? Son algunas de las preguntas que inquietan algunos de los pacientes que han sufrido un accidente cardiovascular.  

Según datos de la Caja Costarricense del Seguro Social cada día cuatro personas fallecen a raíz de un infarto.

Los costarricenses están siendo afectados por la cardiopatía hipertensiva, la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardíaca, las arritmias y las cardiopatías congénitas.  El infarto agudo y el derrame cerebral son la principal causa de muerte en el país de los últimos 45 años.

 Un punto importante en la recuperación del paciente es la forma como él y sus familiares manejan el estrés.

A criterio de Aaron Ocampo, subdirector de la carrera de Psicología de la Universidad Hispanoamericana este es un punto que descuidan algunas familias pese a la modificación de los hábitos de salud.

El término salud es un punto importante en la recuperación del paciente. “Ellos indicaban que salud era estar con los amigos, poder trabajar, ser útil. No solamente es importante la parte física sino también la espiritual. Las personas expresaban que les costaba mucho el manejo del estrés. Las parejas de los pacientes hasta el momento no habían recibido un abordaje psicológico sino solo capacitaciones” señaló Inti Álvarez Castro, Máster en Psicología Clínica y de la Salud, docente   y coordinadora de los proyectos extensión de carrera de psicología de la UH.

“La gente debe aprender que el estrés es la relación de la persona con su entorno. Hay factores desencadenantes: laboral, ambiental, interpersonales, familiares y personales. Puntualmente en la parte interpersonal nos referimos a la comunicación, llegar tarde a una cita, hablar en público o con una autoridad e interactuar con familiares o conocidos. En las causas familiares la ausencia de la pareja o esposo, peleas, muerte de un ser querido y las enfermedades propias o familiares. Por último, en las personales: no tener un proyecto de vida definido, plantearse numerosas metas, exámenes, tareas, notas y pensamientos negativos” explicó Ocampo.

A criterio de los expertos, algunos pacientes recurren a malas estrategias para el manejo del estrés como ver tv en exceso, fumar, comer en exceso, discutir por todo, no escuchar, ingerir bebidas, alcohólicas, arrojar objetos, moverse constantemente, movimientos continuos de    piernas y manos, comerse las uñas, golpear y decidir no hablar.

Para corregir esta situación, la persona debe realizar las siguientes tareas oír música, hacer ejercicio físico, leer por placer, caminar por gusto, desarrollar pensamientos positivos, respirar abdominalmente, bailar por gusto, orar y tener un grupo de amigos.

“La oración es una estrategia centrada en la emoción. A veces hay situaciones que no tienen salida. El orar es muy importante porque la persona puede expresar todo lo que siente y cree que no puede hacerlo con otras personas. Esto es ganancia al lograr sacar todo el estrés de su cuerpo” indicó Aaron Ocampo, subdirector de psicología.

Otras buenas estrategias para superar el estrés son darse un tiempo para pensar en la situación, buscar las alternativas para plantearse soluciones, platicar, dormir y tener hobbies. La persona debe reflexionar cómo debe cambiar sus hábitos y cómo el estrés no está afectando. ¿ Cuáles son las fuentes de mi estrés? y ¿cómo puedo lograr cambiar?. En próximos meses, se seguirá capacitando a más pacientes y familiares de ANPEC para el manejo del estrés.