Redacción- El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) informó sobre la detención de más de 100 presuntos miembros de la pandilla venezolana Tren de Aragua en una redada llevada a cabo en Aurora, Colorado.
La operación, denominada «Operación Aurora», fue un esfuerzo conjunto entre varias agencias federales, incluyendo el FBI, la DEA, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), y los U.S. Marshals.
El operativo comenzó en la madrugada del miércoles y se centró en un complejo de apartamentos en Aurora, donde los agentes realizaron inspecciones puerta por puerta.
Para asegurar la seguridad y el éxito de la operación, se utilizaron granadas aturdidoras y decenas de oficiales federales, quienes ingresaron en las viviendas con armas en mano. Las redadas también se extendieron a otras áreas metropolitanas como Denver, incluyendo direcciones específicas en Aurora y Denver, según reportaron medios locales.
Esta operación es parte de la estrategia de deportaciones masivas impulsada por el gobierno federal, liderada por ICE bajo la nueva administración de Donald Trump, quien regresó a la Casa Blanca el pasado enero. ICE tiene previsto realizar operativos similares en otras ciudades como Chicago y Nueva York, en un esfuerzo por enfrentar las amenazas que representan las organizaciones criminales como el Tren de Aragua.
El Tren de Aragua, conocido por sus actividades delictivas relacionadas con narcotráfico, extorsión y tráfico de personas, ha sido identificado como una de las principales amenazas para la seguridad pública. ICE declaró en sus redes sociales que el objetivo de la operación fue «eliminar esta amenaza de seguridad pública muy real».
El operativo fue realizado exclusivamente por agencias federales debido a que la ley estatal de Colorado prohíbe la colaboración de las fuerzas del orden locales en cuestiones de inmigración, lo que obligó a las autoridades a proceder sin el respaldo de las autoridades municipales o estatales.
A pesar de la intensa operación, algunos residentes denunciaron que los agentes no presentaron órdenes judiciales durante los interrogatorios, lo que ha generado preocupación entre los defensores de los derechos de los inmigrantes. No obstante, estas afirmaciones aún no han sido verificadas.
El incremento en las detenciones ha generado complicaciones logísticas para el sistema de detención de ICE, que actualmente opera al 109% de su capacidad. Como respuesta, el gobierno federal ha comenzado a trasladar a algunos detenidos a la base naval de Guantánamo en Cuba, habilitando hasta 30,000 espacios adicionales para albergar a más personas detenidas en el futuro.