Redacción – La Sele inicia el Mundial encerrada en su media cancha, que ha visto como Serbia domina el balón y organiza sus jugadas en ataque por el sector izquierdo, lugar dónde la Tricolor ha mostrado algunas falencias.

El primer juego de La Sele en el Mundial de Rusia, inició con la adrenalina al máximo, con un equipo nacional encima del combinado serbio, que lucía precavido y sin ideas en los primeros cinco minutos del partido.

El cuadro Tricolor organizaría jugadas en ataque por el sector izquierdo, por intermedio de la sorpresa en el once de La Sele, Francisco Calvo, quién fue uno de los hombres más destacados del elenco patrio en los primeros 10 minutos.

En 11 minutos, La Sele tendría su primera oportunidad clara, gracias a un centro de Johan Venegas que serviría en bandeja de plata para Pipo González, quién empalmaría la pelota con un potente cabezazo que pasaría muy cerca del marco serbio.

La Sele se preocupó más por defender en la etapa inicial.

Esa acción sería la más peligrosa de Costa Rica en el primer cuarto de hora del compromiso.

Serbia, se empezaba a ver mejor en el terreno de juego, gracias a lo ataques organizados por Tadic, quién mandaba todos los balones al lado izquierdo, sector dónde el cuadro europeo veía como el más débil de La Sele.

Pasaban los minutos y Serbia se adueñaba de las acciones del juego, mientras Costa Rica se olvidaba de atacar y se preocupaba más por defenderse de los ataques europeos que para beneficio nacional, no llevaría mayor peligro al marco defendido por Keylor Navas.

En los minutos finales de la primera mitad, La Sele reaccionaría con una gran jugada colectiva Tricolor que sería orquestada por Johan Venegas quién le serviría a Francisco Calvo, para que este, sacara un gran disparo que pasaría un poco desviado del marco serbio.

El primer tiempo terminaría 0-0 en el Estadio de Samara en Rusia.