• La CICR considera que es fundamental mantener a las empresas operando
Redacciòn- La Cámara de Industrias de Costa Rica presentó una lista de medidas urgentes que permitan que las empresas continúen operando, la conservación del empleo y recomendaciones para la mejora en la confianza empresarial y clima de negocios.
Las medidas fueron presentadas a la Ministra de Planificación y Política Económica, Pilar Garrido, y al Ministro de Enlace con el Sector Privado, André Garnier, con el fin de mitigar el impacto del COVID-19 en el país.
Enrique Egloff, Presidente de la CICR explicó que las medidas que ha señalado el Gobierno Alvarado Quesada son responsables y necesarias, pero que desde el sector industrial han querido contribuir con recomendaciones específicas para la mitigación del impacto del COVID-19 en el sector productivo, tanto en las micro, pequeñas, medianas como en las grandes empresas.
“Nos preocupa la afectación directa a las cadenas de abastecimiento, niveles de producción, empleo, inversión y confianza del sector empresarial costarricense por la presencia de la pandemia COVID-19 y el efecto directo en la economía del país, por eso creemos fundamental la flexibilización de ciertas regulaciones, trámites y requisitos  en tres áreas específicas: medidas económicas, medidas para conservar el empleo y frenar las iniciativas legislativas y de reglamentos que representan costos, trámites e impedimentos adicionales al desarrollo del sector productivo”, señaló Egloff.
“En medio de esta emergencia nacional, consideramos clave lograr la continuidad en la operación de las empresas, el tránsito de mercancías y la facturación para preservar el empleo”, agregó Egloff.
Las propuestas son:
  1. Mitigación del impacto del COVID-19 sobre la actividad empresarial
Medidas Económicas:
    1. Flexibilizar la regulación de la SUGEF en cuanto al pago de préstamos por parte de las empresas, especialmente el establecimiento de periodos de gracia (por ejemplo, que durante un mínimo de 3 meses las empresas paguen únicamente intereses y no amorticen el principal) y la readecuación de deudas, para no provocar inestabilidad financiera en las empresas y posible quiebra de empresas por problemas temporales de flujo de caja.
    1. Ampliar fechas de pago del impuesto de renta, IVA y de pagos de cargas sociales a la CCSS, de manera que las empresas no sean reportadas como morosas y se permita la continuidad de sus negocios.
    1. Agilizar desde la ARESEP los ajustes tarifarios hacia la baja de los servicios públicos, tales como electricidad y combustibles.  Así como buscar en el Ejecutivo alternativas para bajar los precios de los combustibles.
    1. Eliminar las multas a empresas por retrasos en entrega de productos a instituciones del Estado.
    1. Agilizar, mediante el uso de declaración jurada, los permisos de construcción que estén asociados a incrementos en la capacidad y productividad de las empresas: ampliaciones, remodelaciones, etc.
    1. Flexibilizar requisitos y trámites en el permiso sanitario de funcionamiento, de manera que se habiliten prórrogas para el cumplimiento de requisitos asociados, para evitar el cierre de negocios (por ejemplo, aplicación del decreto que asocia el permiso de funcionamiento al cumplimiento del Código Eléctrico-CAP, UVIE; suspender el reglamento de Gas LP).
    1. Otorgar los nuevos registros sanitarios y las renovaciones de forma automática por medio de declaración jurada, lo cual evitaría el desabastecimiento de productos de interés sanitario.
    1. Agilizar los trámites de importación: disminuir al mínimo las revisiones físicas de mercancías para evitar atrasos e incremento en costos logísticos.
    2. Mantener el control estricto sobre el gasto público, de manera que la atención de la emergencia no implique un incremento de los gastos corrientes que agudice la crisis fiscal (por ejemplo, que las necesidades sean cubiertas por reasignaciones presupuestarias y no aumento del presupuesto).
Medidas para conservar el empleo:
    1. En los artículos 73 y 74 del Código de Trabajo se indica que por motivos de fuerza mayor se permite la suspensión de la relación laboral, sin la pérdida de derechos laborales. Se necesita generar acuerdos patrono-trabajador refrendados por el MTSS, para que se puedan reducir las horas trabajadas y pagadas, durante el período que establezca el decreto. Esto, siempre y cuando, esta reducción de horas trabajadas se deba al COVID-19.
    1. Mediante trabajo conjunto entre CCSS e INS, no permitir que el pago de incapacidades por parte del INS sea trasladado a la póliza de riesgos de la empresa. Lo anterior, siempre y cuando estas incapacidades se deban al COVID-19.
    1. Permitir la negociación de jornadas laborales flexibles, durante el período de crisis ocasionado por el COVID-19.
    1. Permitir que el aporte patronal a la CCSS se calcule con base en la cantidad de horas realmente trabajadas, no sujetas a un mínimo de contribución.
  1. Mejora en la confianza empresarial y el clima de negocios:
    1. Frenar las iniciativas legislativas y de reglamentos que representarían costos, trámites e impedimentos adicionales al desarrollo del sector productivo: tales como los proyectos de ampliación del alcance de RECOPE, la incorporación del vidrio para que sea tratado como residuo especial, proyectos para aumentar inspecciones laborales por parte del MTSS y proyectos para crear nuevos impuestos.
    2. Eliminar el acoso a los grandes, medianos y pequeños contribuyentes con medidas excesivas de la tributación y centrar los esfuerzos en combatir el comercio ilícito y promover la formalización de empresas. Se requiere generar confianza y trabajo conjunto entre sector público y privado, para salir adelante de esta seria coyuntura.
De igual forma, la Cámara de Industrias de Costa Rica instó a sus asociados a tomar medidas que permitan disminuir la propagación del virus y su pánico asociado; entre ellas, la implementación del teletrabajo en todos los puestos que, según la naturaleza de sus
tareas, lo permitan.
Lo anterior, en el marco de lo acordado entre el patrono y el trabajador. En las empresas, promover el cumplimiento de los protocolos de higiene y aseo recomendados por el MINSA y la CCSS, así como su óptima comunicación a todas las áreas. Implementar planes de contingencia en las empresas, que permitan valorar diferentes escenarios según la evolución del COVID-19.
Las propuestas fueron enviadas a la Ministra de MIDEPLAN y al Ministro de Enlace con el Sector Privado, con copia a la Ministra de Economía, Industria y Comercio, Ministra de Trabajo y Seguridad Social, Ministra de Comercio Exterior, Ministro de Hacienda, Ministro de Salud y Ministra de la Presidencia.